Ciertamente, la palabra de Dios es viva y poderosa, y más cortante que cualquier espada de dos filos. Penetra hasta lo más profundo del alma y del espíritu, hasta la médula de los huesos, y juzga los pensamientos y las intenciones del corazón. Hebreos 4:12

Señor nuestro Dios, ten misericordia de nosotros. Sé nuestro fuerte refugio. Ayúdanos en todos nuestros caminos. Ayúdanos en los caminos oscuros y difíciles por los que a menudo tenemos que andar en la tierra. Concédenos ver tu luz, ya que estás con nosotros. Tú nos ayudas, y permites que el poder de vida de Cristo Jesús esté con nosotros, para que tu nombre sea honrado en la tierra por medio de muchos que te aman y vienen a ti, rogándote en oración. Danos la luz de tu Palabra, para escucharla y vivir rectamente. Incrementa nuestra fortaleza para la lucha, a la cual nos has llamado. Bendícenos a todos. Alumbra nuestros corazones, para que realicemos todo lo que has prometido a través de tu Palabra. Amén.